Después de desayunar como es debido y de comprar algo de comida, a las 12:30 salimos de Torla hacia Ainsa pasando por el valle de Broto. Desde Ainsa tomamos dirección hacia Bielsa y desde allí remontamos el valle de Pineta hasta el circo del mismo nombre. Dos horas de coche fueron necesarias para llegar al punto de partida de nuestra excursión.
En la foto, tras remontar el "Mohonno" de arboleda empezamos a subir hacia el circo de Pineta.
Aquí casi entramos directamente en zona de alta montaña. En el centro el pico Pineta (2861) y la Punta del Forcarral (2718) que constituyen la escena del circo de Pineta que se abre hacia el Este uniendo el macizo del Monte Perdido por el sur (izquierda de la foto) con el circo d'Estatube en Francia (derecha de la foto).
No recuerdo subir más de 15 kilos desde aquellos 28 que subí hasta los prados del Eiger hace 13 años. Estos son menos y además mucho más agradables de llevar. Doblemamá necesita ir ligera en este tramo.
Parar unos cuantos metros pasada esta cascada es un buen lugar para comer.
Alejandro espera con impaciencia su comida mientras se trinca unos Grassini.
Si estuviéramos más alto y no hubiera nubes, detrás de mi cabeza aparecería la cima del Monte Perdido
Un paseo sencillo para quienes vayan sin peques pero realmente interesante. Llegar a los llanos de Lalarri (foto de abajo) es un momento muy gratificante. Al Norte (fondo de la fotografía) se extiende el canal del Tormarcal y la Peña Blanca (2906) cuyas paredes forman la frontera con Francia, al otro lado de estas paredes cae el circo de Troumouse.
La orilla del río Lalarri está repleta de madrigueras de marmotas. Pudimos ver cómo una nos observaba desde el fondo de esta fotografía.
El valle de Pineta presenta un aspecto totalmente alpino desde los llanos de Lalarri.
Estos pastos sirven para alimentar a vacas y caballos. Y para que Alejandro vaya mugiendo todo el camino hasta el río...